fuente.- elpais.com 14/12/2009
Berlusconi, agredido en Milán por un hombre con problemas mentales que le lanzó un souvenir -una estatuilla de plástico y yeso en miniatura de la catedral de Milán- que impactó en la boca del primer ministro. Al ser detenido, dijo: "Yo no soy nadie".
Resulta extraña la frase del agresor, es imposible que confundiera a Berlusconi con Polifemo; por la altura mismamente. Lo cierto es que el agredido seguro que llegó a dudar si eran gigantes o molinos quienes le atacaban.
De todos modos, si hay algún paralelismo con la obra cervantina la figura de Il Cavaliere respondería más a Sancho que a Don Alonso aunque Don Silvio también tiene una Triste (penosa) Figura.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Se admiten comentarios incluso anónimamente. Lo único es que no se publicarán hasta su filtrado para evitar cosas indeseables para todos.